lunes, 28 de noviembre de 2016

Explicar una Red



Nos encontramos inmersos en la unidad didáctica de Redes Informáticas. 

El primer paso es explicar el término de "Red", pero no creo que la exposición teórica de una definición sea lo más adecuado para un aprendizaje adecuado de este término y lo que esto significa.

Para explicarlo recurro a un ovillo de lana.

Llego a clase y pido que todo el alumnado intente mirar hacia quien tiene el ovillo en ese momento. Ese alumno lanza el ovillo hacia otro compañero que lo coge. Todos miran ahora a este otro. Aquel, lo lanza de nuevo y así sucesivamente, cruzándose en diversos puntos, haciendo que, al cabo de un rato y de varios lanzamientos, todo el ovillo se encuentre entrelazado.

Los alumnos sujetan los cruces que van produciendo a través de ellos, teniendo ya los nodos de esta red gigantesca en el aula.

Con esto, ahora sí que podemos explicar una red, qué son los nodos, y cómo se produce la comunicación entre los distintos nodos de conexión. Nos permite explicar, que aunque se corte un camino de comunicación, la información sigue llegando al nodo de destino, al seguir un camino diferente.

Eso es la red de Internet. Una gran red donde multitud de nodos están interconectados con los demás a través de diferentes caminos.

La dinámica enriquece, hace que se cree un ambiente receptivo y emocionalmente adecuado para un aprendizaje significativo y constructivo.

Pienso que hay que emocionar, que desconcertar al alumnado, para posteriormente enseñar conceptos desde dinámicas prácticas, para que el aprendizaje del alumnado se convierta en algo significativo e inolvidable.

Ese es el objetivo, sorprender, siempre, desde la creatividad...

lunes, 21 de noviembre de 2016

LA INFORMÁTICA NO SE ENSEÑA, SE APRENDE


En las clases de informática, la primera premisa que les lanzo a los alumnos es que "la informática no se enseña, se aprende".

Por mucho que nos dediquemos a explicar con una presentación cómo se utiliza una determinada aplicación nos encontraremos con el alumnado aburrido en clase y no atendiendo, por lo que la adquisición de dicha información no se logrará. Por ello, siempre invito al alumnado a seguir tutoriales (elaborados por mi) donde se indica paso a paso, y con imágenes, cómo funciona el software. Paralelamente, van creando un determinado documento, como aplicación.

También, y según el programa, me gusta preparar fichas guiadas para ir aprendiendo los distintos conceptos. El trabajo final suele ser una tarea que incorpore todo los elementos trabajados.

En programación, como en Scratch, trabajo con el manual de Informática Creativa con Scratch, donde diferentes fichas permiten lograr que el alumnado desarrolle el pensamiento computacional, así como la creatividad. Es una herramienta que, posteriormente, se trabaja en otras materias como matemáticas.

Siempre, en informática, es mejor que el alumnado aprenda por sí mismo el funcionamiento de un programa porque realizará un aprendizaje significativo y le permitirá afrontar el mismo con seguridad y conocimiento.

Además, la utilización de tutoriales, les aporta la adquisición de la competencia de aprender a aprender, para que cuando necesiten conocer el funcionamiento de un programa, sabrán buscar un tutorial en las revistas especializadas o libros, y seguirlos para aprender su manejo.

Hay que buscar que el alumnado se maneje bien en el autoaprendizaje y, la informática, favorece esto.

martes, 15 de noviembre de 2016

Playing for a better future


En el aula, cuando iniciamos las clases o iniciamos cualquier tipo de proyecto, me gusta lanzarles el comentario de que vamos a aprender jugando para hacer un mundo mejor y utilizo el lema de Imaginarium "Playing for a better future".

Enseñamos para que nuestro alumnado aprenda, pero aprenda para que en un futuro construyan un mundo mejor. 

Si se enfoca la dinámica del aula como un juego, lograremos que el alumnado disfrute de lo que está haciendo. De esta idea es de donde nace la terminología de gamificación.

Haciendo una retrospectiva, la gamificación no es algo nuevo en nuestras aulas. Cuando yo recibía clases, algunos profesores nos incentivaban nuestro aprendizaje asignándonos puntuaciones que se iban anotando en el reverso de la libreta, así como cambiándonos de lugar en el aula, estando más o menos cerca del profesor dependiendo de nuestro trabajo en el aula. Faltaba la asignación de insignias, pero el método era muy efectivo.

Es importante crear un ambiente favorecedor de adquisición de conocimientos y una de las grandes herramientas es la gamificación y el propio "juego".

Aprendamos jugando para un futuro mejor.


martes, 8 de noviembre de 2016

Educación Emocional



Uno de los aspectos que es importante trabajar en el aula y que favorece el desarrollo de la creatividad es que el alumnado se encuentre en un equilibrio emocional adecuado.

Son muchos los momentos que atraviesan de estrés y agobio los alumnos y alumnas cuando se tienen que enfrentar a pruebas decisivas, así como ante cuestionarios y exámenes.

También la ansiedad hace su aparición cuando nos enfrentamos a ciertas dinámicas en el aula.

Para minimizar estos efectos de estrés, agobio y ansiedad en el alumnado y buscar un equilibrio emocional adecuado se recurre a una técnica de relajación denominada DROP.

Cuando les comento a mis alumnos y alumnas este término se ríen y se ponen nerviosos. 

Consiste en:


  • Detente. Hay que parar de hacer todo lo que se está haciendo.
  • Respira. Cierra los ojos (si se puede) y respira hondo para que los pulmones se inunden de oxígeno, durante unos instantes.
  • Observa. Relaja la mente y observa con el pensamiento tu entorno buscando el equilibrio.
  • Prosigue. Abre los ojos y continúa con la tarea.
El alumnado al practicar la dinámica comprueban cómo se relajan y encaran más tranquilas las pruebas, cuestionarios o actividades que se pueden presentar diariamente en el aula.


Les gusta mucho, y en aquellos momentos que existe cierta inquietud, ellos mismos invitan a los compañeros a unos instantes de relajación para proseguir la tarea mucho mejor.

Esta técnica me llegó a través de Verónica Cruz y Pedro Delgado que organizan cursos de comunicación e inteligencia emocional (Rapport)

jueves, 3 de noviembre de 2016

Trabajo cooperativo: cabezas numeradas



A estas alturas del curso, uno comprueba que algunos de sus alumnos se descuelgan del normal desarrollo de las clases. La motivación, la falta de autoestima, la visión por parte de sus compañeros es baja..., hace que el rendimiento sea menor y no trabajen como se espera de ellos.

Unas de las herramientas que disponemos es usar metodologías alternativas que intenten motivar al alumnado que no lo está.

Suelo utilizar el método denominado cabezas numeradas.

En la unidad didáctica de "Los Plásticos", establezco varios grupos de cuatro alumnos y alumnas (pero no elegidos al azar, si no que se seleccionan para que sean grupos heterogéneos). Estos grupos se numeran, así como a los distintos miembros del grupo.

Se plantea una pregunta en la pizarra, cuya solución se encuentra en el libro de texto, en unos casos, o en la web, en otros. El alumnado, de manera conjunta, buscan la respuesta, hacen un consenso y escriben la solución en el cuaderno. Memorizan esa información (quizá esta parte sea la que menos me guste en el método, aunque es interesante por lo que se comenta a continuación).

Tras un tiempo, se dice un número, y todos los alumnos con ese número salen a la pizarra, y se elige uno al azar (o no), para que responda a la pregunta. Si responde adecuadamente se le suma un punto a él y a todos los miembros de su grupo, Si no lo hace, se le resta un punto. (Con este sistema, estamos aplicando la gamificación, motivándolos de una manera considerable).

La memorización es muy interesante porque al estar integrados los grupos por alumnos y alumnas de distintos niveles académicos, motivación, etc., y al depender de la puntuación final de la respuesta de cualquiera de ellos, esto hace que durante la búsqueda de información, la redacción y la propia memorización haga que el alumnado más motivado impulse al que menos está, introduciendo a todos los miembros en una dinámica de trabajo, de apoyo, de refuerzo y de reconocimiento que hace que la autoestima se potencie en todos ellos. Es increíble el dinamismo que surge en este tipo de dinámica.

Me funciona en el aula. Mejora el ambiente de clase. El alumnado se reconoce importante en el grupo. Se estrechan lazos.